Chile Vamos y el centroizquierda en caso de victoria del Rechazo
El sábado 20, el tren que transportaba al presidente Gabriel Boric hizo su última escala en Chillán, donde se celebró el 244 aniversario del natalicio de Bernardo O’Higgins. Como es costumbre en sus giras, entrevistó a la radio local Macarena. “Aquí no puede haber ganadores y perdedores; necesitamos unirnos en torno a nuestras reglas básicas y en torno a algo que parece tener consenso”, dijo. Desde el centroderecha y el centroizquierda coinciden en que para agilizar los tiempos y establecer un mecanismo concertado es fundamental no pisar los dedos de los vencidos. Evidentemente, otros sectores iniciarán la correspondiente caza de brujas.
¿Por qué es importante? Si el Vamos chileno y los partidos de centroizquierda quieren evitar una fractura en la noche del 5-S, y lograr así un acuerdo para dar continuidad al proceso constituyente, en La Moneda el oficialismo y la oposición tienen claro que la derrota del El visto bueno supone un duro golpe personal para Boric y el Gobierno, que han apostado por esta opción. El reto para ellos es más bien que las lesiones tomen un curso natural, que debe terminar con un cambio de gabinete, entre otras cosas.
- En entrevista con T13, el senador DC Matías Walker dijo que “nadie quiere ver derrotado al presidente la noche del 4 de septiembre si gana el rechazo. Queremos invitarlo a ser parte de la solución. Los comentarios del presidente a Chillán son congruentes con lo que ha propuesto Walker y lo que buscan otros partidos políticos.
- El ejecutivo, al ser un “colegislador”, debe desempeñar un papel clave para acelerar el proceso. Ya existe consenso en que se evitará un plebiscito de entrada para entrar directamente en la elección de representantes convencionales que representen a los ciudadanos, uno de los principios que se establecieron en el plebiscito anterior. Sin embargo, todavía hay voces que buscan asentar la idea de que los expertos impulsan el proceso. Fuentes del partido señalan que “esto es ridículo. Primero, porque el nivel de participación electoral que tendría una elección con “expertos” en la boleta sería bajo, lo que afectaría negativamente la representatividad de una nueva constitución.
- Pero los riesgos están en la reacción del PC/FA y del Partido Republicano. Las frases destempladas y las críticas infundadas procedían de estos sectores. Algunos comenzarán el clásico proceso de caza de brujas; otros gritarán victoria en el tímpano al perdedor.
- Eso sí, señalan los analistas, “habrá ganadores y perdedores como en cualquier elección. La pregunta es cuándo y cómo sucederá esta Noche de los Cuchillos Largos. Va a haber fiestas en las calles, quizás algún desorden, alguna polarización. Por eso, añaden, “esta vez las hojas frías deben venir del parlamento”.
- Por la misma razón, se ha puesto el acento en un pacto entre el centro izquierda y el centro derecha que facilite las etapas posteriores en relativa armonía. En ella juegan un papel fundamental el PS, PPD, DC, UDI, RN y Evópoli. Aunque las diferencias internas por «minutos de pantalla pueden generar ruido innecesario con un gran costo para el país», advierten.
El factor tiempo. Las elecciones municipales se realizarán el 27 de octubre de 2024. Según varios parlamentarios que participaron en las conversaciones del “día después”, es fundamental aclarar previamente la cuestión constitucional por dos razones. En primer lugar, evitar un mayor período de incertidumbre. Segundo: no hostigar a los ciudadanos de las elecciones, sobre todo después de un proceso de debate constitucional que ha terminado por cansar al ciudadano que quiere soluciones al aumento de la delincuencia, la inflación y el crecimiento económico, según diversas encuestas.
- El 17 de agosto, la Senadora Ximena Rincón y Matías Walker se reunieron con el Ministro Giorgio Jackson. Durante la reunión, solicitaron a la Segpres hacer urgente una reforma constitucional que asegure la continuidad del proceso constituyente en caso de que prevalezca la opción de rechazo.
- Los parlamentarios de DC, junto a Iván Flores y Fidel Espinoza, buscan aprobar la modificación del artículo 142 de la Constitución, estableciendo que si se rechaza lo propuesto en el plebiscito de ratificación, “el Presidente de la República, dentro de 15 días, enviará al Congreso Nacional un proyecto de reforma constitucional para definir democráticamente los mecanismos conjuntos para la continuación del procedimiento de redacción de una nueva Constitución, la cual deberá ser promulgada en un plazo no mayor de 30 días desde su sala.
- Sumado a lo anterior, hoy martes, Andrés Tagle dijo en Radio Universo que “normalmente nosotros, en este caso del Plebiscito, hemos fijado el cierre del registro en 125 días, que es nuestra primera acción. Yo diría que por lo menos 125 días antes de que se apruebe y se informe porque se necesita cerrar el registro y auditar el registro.
- De prevalecer el consenso, la elección de electores podría darse en diciembre o enero de 2023. Como señaló Andrés Velasco en entrevista con Ex-Ante, “una nueva Convención podría hacer su trabajo en seis meses, al contar con un panel de expertos que hacen recomendaciones no vinculantes.
- Salvo contadas excepciones, existe consenso en que la nueva convención debe ser representativa de los ciudadanos (lo que excluye la lista de expertos o el papel hegemónico del Congreso), iguales, sin plebiscito de entrada, sin salida de independientes del pacto. , y un sistema de votación electoral similar al de las elecciones parlamentarias.
Cortina de fondo. Si el Vamos chileno y los partidos de centroizquierda quieren evitar una fractura en la noche del 5-S, y lograr así un acuerdo para dar continuidad al proceso constituyente, en La Moneda el oficialismo y la oposición tienen claro que la derrota del El visto bueno supone un duro golpe personal para Boric y el Gobierno, que han apostado por esta opción. El reto para ellos es más bien que las lesiones tomen un curso natural, que debe terminar con un cambio de gabinete, entre otras cosas.
- El problema, además, es que los intereses de las 2 coaliciones bóricas no tienen una correlación común, como en otras ocasiones. Si la centroizquierda apuesta por lograr un acuerdo post 5-S, en el PC -y en los sectores del Frente Amplio- ya han dado señales claras de que su curso de acción no será necesariamente el mismo que el de sus aliados
- No sólo porque el PC y el FA, de hecho, fueron los grandes articuladores de la propuesta de la Convención y, por tanto, una derrota por Aprobación significa un fuerte revés para ellos. En el partido de Guillermo Teillier, así como en Convergence sociale, el del presidente Boric, ya advirtieron que no están dispuestos a cruzar ciertas líneas rojas que, de no ceder, podrían dificultar un acuerdo transversal, como la reedición. del mismo mecanismo que se utilizó en 2020 para elegir la Convención esta vez.