lo que expuso Ahumada a los diputados

José Miguel Ahumada dijo a los parlamentarios que continúa el proceso de consulta de política comercial chilena, que en el pasado ha sido cuestionado por el Tesoro por buscar “legitimar” los TLC. El subsecretario se presentó en la Cámara de Diputados con una valoración más positiva de los acuerdos comerciales negociados por gobiernos anteriores.

Cambio de tono. El subsecretario de Relaciones Económicas Internacionales del Ministerio de Relaciones Exteriores, José Miguel Ahumada, compareció ante la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados con un discurso mixto. Por un lado, valoró el entramado de acuerdos comerciales que había criticado en el pasado y, por otro lado, sugirió que tenía que haber un cambio en la estrategia que Chile había seguido hasta ahora en esta materia.

Entre los puntos que más enfatizó Ahumada es que él está allí como funcionario público cumpliendo un programa de gobierno. Se distancia así de su anterior visión como académico, cuando era un opositor declarado a la línea comercial seguida hasta entonces por gobiernos anteriores (incluidos los de Michelle Bachelet) y habla del TLC con EE.UU. como símbolo de neoimperialismo.
“Este programa muestra claramente que el dinamismo de las exportaciones se basa en acuerdos comerciales bilaterales y no será cuestionado”, dijo.
“Fue bastante diferente a todas sus declaraciones anteriores… Hoy lo vimos muy partidario de los TLC, diciendo que los iban a profundizar. O nos cambiaban de subsecretario o dábamos otra pirueta”, dijo la diputada Catalina del Real (RN) tras la sesión.

Consulta pública. En este contexto, Ahumada mencionó varias veces -algunas propietario de motuen otros, en respuesta a preguntas de los parlamentarios, la decisión de la Subsecretaría de Relaciones Económicas Internacionales (Subrei) de continuar con la consulta pública sobre la política comercial chilena, basada sobre todo en los tratados de libre comercio (TLC).

En mayo, la noticia de la consulta ciudadana -que nunca fue vinculante- generó polémica, pues sorprendió al ministro de Hacienda, Mario Marcel. Cuando se discutió la consulta, se presentó como una forma de “legitimar” los TLC, cuando todos fueron aprobados por el Congreso, como recordó el propio Marcel. Entonces, la jefa de Relaciones Externas, Antonia Urrejola, tuvo que salir a descomprimir la polémica, al punto que hubo cambios de fechas respecto a la consulta y de pronto pareció salirse del radar de prioridades de la Subrei. Hasta ahora.
En su presentación a los diputados, Ahumada recordó que en las negociaciones comerciales está la “Cámara de Diputados” y también está el Consejo de la Sociedad Civil (Cosoc). Pero no basta con hablar a los ciudadanos. “Necesitamos dar un nuevo impulso; Una de las ideas es hacer un proceso de consulta, para que la ciudadanía también participe de lo que serán las orientaciones de una futura política comercial, y así hacer de esta política comercial, con estos desafíos que nos esperan, una política que pueda llevar adelante. sus hombros los retos que tenemos”, expresó inspirado.
Algunos parlamentarios, como Félix González (PEV) y Cristian Labbé (UDI), cuestionaron los componentes específicos de la estrategia que busca implementar la Subrei. Considerando esto, Ahumada dio más detalles sobre la solicitud. Dijo que los procesos de consulta sobre la dirección de la política comercial son prácticas recomendadas por la OCDE y se han llevado a cabo en Nueva Zelanda, Canadá y Suiza.
Luego mencionó que estaban trabajando en un registro de actores a consultar, algunos de los cuales podrían provenir del Cosoc.
En Chile, dijo, la primera parte de la consulta se hará a través de una plataforma virtual. “Es como estar en Nueva Zelanda. Todas las personas, sindicatos u organizaciones pueden dar su opinión o incluso subir sus propios textos sobre la política comercial que quieren para el futuro”.
El segundo «pilar», como lo llamó, será «reuniones con los principales actores involucrados en el comercio internacional». Serían “actividades bilaterales con actores en las que escuchamos las sensibilidades de sindicatos, organizaciones de la sociedad civil”.
Para llevar a cabo la consulta, el Gobierno contratará una firma consultora externa, a través de un llamado a licitación. La firma deberá diseñar la metodología y la estructura de la consulta.
También habrá un consejo asesor externo que recopilará comentarios de ambas etapas. Esta asesoría “va a sistematizar un documento no vinculante que será entregado a la presidencia y al Ministerio de Relaciones Exteriores”, dijo el subsecretario.
Como estimación preliminar de costos, la autoridad señaló, «en promedio, sería entre 15 y 25 millones [de pesos]. Estamos pensando en esta gama”.

Fechas y detalles. Ex-Ante consultó con la Subrei para saber cuándo se realizaría la licitación y cómo planean conformar el Consejo Consultivo Externo. Las respuestas a continuación:

“La licitación de la Consultoría está prevista para el último trimestre de este año”.
“El Consejo debe tener una representación amplia. Estará integrado por representantes de las PYMES y grandes empresas, así como representantes de la sociedad civil organizada y la academia. Se considerará la paridad de género y la inclusión de representantes de los pueblos indígenas. El tablero funcionará en el punto de mira por un período aproximado de 4 meses, el cual recibirá insumos de la primera etapa vía web y reuniones, como fuente de información.
“Trabajaremos con el actual Cosoc de Subrei para definir a los participantes, en base a su experiencia con la sociedad civil y sindicatos a nivel nacional”.

Estrategia comercial. Entre los elementos del discurso de Ahumada que más sorprendieron a los parlamentarios, especialmente a la oposición, estuvo su visión de la red de acuerdos comerciales. Como había señalado la Subrei a Ex-Ante, al destacar una «política de Estado» en la continuidad de las negociaciones, ahora Ahumada enumeró cómo, desde 1990 hasta el presente, ha habido un aumento de empresas exportadoras, número de productos embarcados y mercados añadidos.

Luego planteó lo que prácticamente todos sus antecesores revelaron al asumir este cargo (antes Direcon, ahora Subrei): que es necesario diversificar productos, empresas y mercados.
En este caso, destacó el interés de Chile en ampliar el mercado indio, país con el que existe un Acuerdo de Alcance Parcial (AAP). «Solo tenemos una ventaja del 9% en el universo arancelario de la India», dijo. Dijo que hay sectores en los que ha sido difícil incursionar, como nueces, vinos e incluso cobre. “Queremos profundizar este acuerdo. Viajaremos a la India para dar una señal política”, dijo.
Otro caso de interés es el avance de las negociaciones con Emiratos Árabes Unidos, donde observa que hay «grandes capitales» que podrían invertir en la industria de la desalinización.

Revisión de acuerdos. Entre los interrogantes que suele aclarar la Subrei -y que vuelven a consultar diputados como Christian Moreira (UDI)- está si sigue vigente una idea que surgió en el mandato del candidato Gabriel Boric de «revisar» unilateralmente los tratados.

“Los acuerdos comerciales siempre se han discutido entre las dos partes. Estas son las comisiones de libre comercio, siempre en diálogo, nunca unilateralmente”, dijo (y repitió) Ahumada. Puso como ejemplo lo que está pasando con la Unión Europea: en el acuerdo de modernización, la UE pidió la creación de un tribunal de inversiones permanente, en línea con una tendencia mundial en esta materia. Como hay una coincidencia entre las partes, continuó. “Queremos abordar nuevos temas en estos procesos de revisión bilaterales y consensuados”, insistió el Subsecretario.

TPP11. El gobierno ya indicó que tendrá una definición del TPP11 (CPTPP) tras el resultado del plebiscito de septiembre. José Miguel Ahumada explicó por qué: todo está vinculado al artículo 289, inciso 12, de la propuesta. Dice: “Al negociar tratados o instrumentos internacionales de inversión o similares, quien ostente la Presidencia de la República procurará que los órganos de solución de controversias sean imparciales, independientes y preferentemente permanentes”.

El TPP no innova en esta materia, ya que deja la resolución de controversias al arbitraje internacional, como suele ser el contenido de otros acuerdos chilenos. Sin embargo, la lectura del ejecutivo es que si se aprueba la nueva Constitución, habría una vulneración del mencionado artículo constitucional.
“A la espera del plebiscito, retomaremos esta discusión para que los acuerdos cuenten con mecanismos neutrales, imparciales y permanentes de solución de controversias”, dijo Ahumada.
En todo caso, el llamado TPP11 ya fue aprobado por la Cámara de Diputados. Todavía no se ha puesto sobre la mesa para ser votado en el Senado.

política productiva. Uno de los temas más distintivos que ha perseguido este Subrei es la idea general de avanzar en la política industrial, entendida como la dirección de la acción estatal en sectores prioritarios para el propio sector privado.

En ese sentido, dijo que se pone especial énfasis en impulsar la producción de litio e hidrógeno verde. En ambos casos, se trata de promover una política virtuosa de sectores productivos que permita mayor valor agregado a los recursos naturales no renovables donde Chile tiene ventajas competitivas.

Sesión secreta. El Subsecretario solicitó cubrir en secreto parte de la reunión del comité, vinculada en particular a las negociaciones que Chile busca reabrir para modernizar el acuerdo de asociación con la Unión Europea.

En esta parte de la cita, en todo caso, no ahondó en los temas ya conocidos por la opinión pública (y que también expuso frente a un grupo de senadores hace unos días). Entre ellos, una nueva mirada a las inversiones para permitir la transferencia de tecnología y precio de exportación.
Ahumada también mencionó que la Unión Europea tiene sus propias dificultades con el procesamiento interno, dado el llamado mecanismo de división o tripartición.